10.11.2010

La palabra, el libro, editados ya sea en papel o en humo, no desaparecerán


(Entre 15 y 20, Rita Martín entrevista a Félix Luis Viera)

El conocido poeta, cuentista y novelista cubano Félix Luis Viera presentará en breve, el 20 de octubre, su más reciente novela El corazón del Rey, publicada por la Editorial Lagares. Sede: Centro Cultural José Martí de la Ciudad de México D.F., México. Nos place invitarlos no sólo a esta entrevista con el autor sino a leer también un avance de El corazón del Rey en nuestro Grafoscopio. Para ello, pique en el enlace y disfrute de una prosa fuerte, extensa (515 p) y de calidad: El corazón del Rey que ya cuenta con una reseña crítica de Abel Germán:  La memoria de un hombre sin rostro.

Razones para la escritura
el escritor escribe por lo mismo que el canaricultor cría canarios
R.M.: ¿Por qué se escribe o qué significa escribir?
F.L.V.: Al menos yo escribo porque es lo que sé hacer con regular o poca fortuna, depende del lance. O no sé si debo decir que es lo que me gusta hacer. Del mismo modo que a un deportista, un cantante, un cosmonauta, un pintor o un compositor les gusta lo que hacen. Con esa pasión se nace creo. Bueno, escribir significa tanto que para qué decirte. Ya muchos autores han dado respuestas inteligentes. Para mí, entre otras razones, significa rebelarme contra algo, a la vez, claro, que alabo lo contrario. Pues nada, cada loco con su asunto, el escritor escribe por lo mismo que el canaricultor cría canarios.
el origen como simiente, génesis o algo así– es muy difícil de precisar
R.M.: ¿Cuál fue el origen de libros tales como En el nombre del hijo y Las llamas en el cielo?
F.L.V.: Coincido con quienes afirman que el origen de los libros –el origen como simiente, génesis o algo así– es muy difícil de precisar. En el caso de los dos libros que refieres, ambos de cuento, los escribí luego de haber quemado –literalmente– cinco anteriores. Algunas personas que leyeron estos originales (los quemados) decían que eran publicables. Pero yo "sentía" que no había hallado mi registro narrativo. Creo que en estos dos libros que aludes lo agarré al fin. El mundo de ese barrio que resulta en escenario de estos dos libros, era mi mundo creador en esa etapa. Hoy, desde el punto de vista sentimental, sigue siendo mi mundo. Las llamas en el cielo (1983) se demoró seis años en publicarse. Decían, quienes decían lo que había que decir, que tenía "problemas ideológicos".
la novela trata de aportar para que los investigadores que vendrán no pierdan su tiempo en las hemerotecas
R.M.: ¿Por qué Un ciervo herido? Hablemos un poco de su última novela El corazón del rey.
F.L.V.: Quizás ya he dicho demasiado sobre esta novela (y en cuanto a la otra no digas "la última", que eso sabe a féretro, mejor di la más reciente). Nada, como otros asuntos que cualquier escritor se cree en capacidad de escribir. Lo más difícil de Un ciervo herido –ya lo he dicho– era encontrar el narrador. Treinta años después del "suceso", se me ocurrió que debía ser un narrador muy subjetivo. Sólo así, en mi opinión, se podría llevar a cabo un relato donde las tragedias resultarían tan abundantes que se harían comunes.
El corazón del rey, extensa, con varios planos narrativos que creo que, quien así lo quisiera, los podría leer por separado, se desarrolla en la década de 1960, durante ese período de la implantación a la fuerza del "socialismo real" en Cuba. La novela en buena medida cuestiona la "ideología" socialista, pero creo que de manera no panfletaria. Son varios los personajes principales, los cuales se repelen entre sí porque los separan "barreras ideológicas" o "éticas". Está Robertón Pérez, el cabrón de la vida; la Samaritana, un homosexual muy humanista; la "revolucionaria" intachable; el fanático; otro que no entiende nada pero trata de ir adelante, y así. Varias historias se entrecruzan, claro, y viene a ser además un fresco de las costumbres de aquella época, y de la pérdida de éstas a partir de los cambios "revolucionarios". Se desarrolla en Santa Clara, en sus calles, sus bares, sus parques, sus hoteles de paso, los prostíbulos cerrados por decreto. Me demoré mucho tiempo en esta obra, que reescribí tres veces. La comencé el 14 de abril de 1990. Es muy difícil lo que me propuse: entre otros objetivos, abordar eso que me ha dado por llamar la "épica cotidiana" en el socialismo cubano. A un escritor de más talento que yo le hubiese quedado mejor. ¿Te imaginas qué encontrará sobre aquella época en las hemerotecas un investigador en el futuro? Nada, la felicidad de un pueblo honrado y trabajador guiado por su comandante invicto y victorioso. La novela trata de aportar para que los investigadores que vendrán no pierdan su tiempo en las hemerotecas.
hay otros autores que escriben muy bien y que son tocados con ese misticismo, de modo que hay considerarlo
R.M.: ¿Cómo describiría el proceso creativo en Ud.? ¿Se debe hablar de inspiración o de espiración?
F.L.V.: Yo le llamo excitación, eso de estar tomado, obsesionado con un idea. Una excitación como otras que existen. La inspiración no existe para mí. Al menos esa inspiración de pajaritos que cantan al oído y hadas que te indican el camino. Yo nunca he sentido eso. Pero hay otros autores que escriben muy bien y que son tocados con ese misticismo, de modo que hay considerarlo.

Soledad y multiplicidad
los malos momentos –¿pantalla en blanco, verdad?– yo los invierto en leer
R.M.: ¿Existen condiciones específicas para que el creador pueda trabajar o son mitos? ¿Cómo supera los malos momentos de bloqueo o página en blanco?
F.L.V.: Cada cual necesita –o se adapta a– situaciones distintas, según he podido comprobar. Los malos momentos –¿pantalla en blanco, verdad?– yo los invierto en leer. La excitación llegará en cualquier momento. Y si un día no llega por fin, será porque ya se acabó el play; y entonces, qué le vamos a hacer.

lo cierto es que uno puede ser o tener varias "otredades". Al menos a mí me ocurre
R.M.: Borges señala una Otredad múltiple en Borges y yo. ¿Cree Ud. en esta multiplicidad de yo en el escritor o una otredad que se sabe y no se alcanza a definir?
F.L.V.: Hay muchas cosas que no se alcanzan a definir, lo mismo hechos de nuestra vida individual, digamos, que asuntos universales como el amor entre dos seres –dos seres que no son familiares entre sí, quiero decir, y que, esto es lo más hermoso, hacen comunión entre ellos–. Lo cierto es que uno puede ser o tener varias "otredades". Al menos a mí me ocurre.

Oficio
nunca se acaba un libro, "se abandona", como dijo alguien
R.M.: Pensemos en estas acciones: escribir, destruir, corregir, editar… ¿Qué es preciso evitar en literatura? ¿Cómo alterna Félix, el poeta, los géneros poesía/narrativa?
Sobre todo corregir, y volver a corregir. Aun cuando el libro está impreso uno quisiera aplicarle correcciones, variantes. Y si hay una segunda edición allá vamos para afinar de nuevo. Nunca se acaba un libro, "se abandona", como dijo alguien.
F.L.V.: Evitar salirse de lo que algunos llaman registro, otros voz y mundo, otros tono, pero que finalmente no queda muy claro. Es decir, algo que te identifica como autor, un mundo que es el que te corresponde. Y no hablo de un mundo "físico", claro, sino de algo en donde se imbrican contenido, estilo, otras expresiones de la forma y mucho más. Si uno se sale de eso, por cualquier autocensura que se imponga, el producto queda muy por debajo de las posibilidades. Hay un sello que identifica o debe identificar a un autor, y se nota cuando se sale de los carriles que lo conducen a esa "individualidad". De modo que un autor no está capacitado para determinada anécdota, como si lo está otro. Porque hay anécdotas, contenidos, líneas temáticas o lo que sea que no "pertenecen" a determinado escritor, si bien, con oficio, las puede abordar y sacarlas adelante con suficiente decoro, pero nunca alcanzará lo mismo que cuando se desenvuelve en su "mundo natural".
en la medida en que un escritor se desarrolla puede ayudar mucho en cuanto a la edición
R.M.: Hablemos del Félix editor.
F.L.V.: Bueno, poco tengo que decir, creo que en la medida en que un escritor se desarrolla puede ayudar mucho en cuanto a la edición –de libros de creación–. Pienso que toda obra requiere de la evaluación de un editor, de un editor-escritor si es posible, o de un editor que aunque no sea creador, tenga ese ojo para ver dónde falta, dónde sobra, dónde debe variarse; este tipo de editor es un artista igual que el autor del libro, y ya casi no quedan tipos así.
En este campo no he realizado muchas labores, pero me siento satisfecho por lo realizado. Creo que las mismas condiciones hay que tener para editar revistas, si bien en un orden más pragmático, puesto que éstas tienen un perfil, un público a quienes van dirigidas, una razón preconcebida. Aquí hay una norma a la cual hay que atenerse.

Identificaciones de la literatura
Más bien es una neurosis y una locura
R.M.: ¿Es la escritura una salvación ante la neurosis y la locura?
F.L.V.: No. Yo no lo creo. Más bien es una neurosis y una locura.
Soñando andamos siempre, quizás todas las personas, no sólo los creadores
R.M.: ¿Qué coordenadas encuentra entre sueño, filosofía y escritura?
F.L.V.: Soñando andamos siempre, quizás todas las personas, no sólo los creadores. La Filosofía ayuda mucho en todos los sentidos, si bien nos llega a desesperar, como "asignatura" quiero decir, a quienes somos sólo sus consumidores. Y en verdad hay máximas filosóficas que están por encima de mi inteligencia. Hay tantas obras literarias de reflexión filosófica –basadas en lo innato, no en una escuela o tendencia filosófica– que resultan formidables. Hay mucha correspondencia entre una cosa y otra. Pero figúrate, los comunistas quisieron meterle el materialismo histórico a la creación y ahí se jodió la cosa. Bueno, me da por pensar en lo que muchos llaman la "filosofía de la vida"; de aquí brotan innumerables argumentos interesantes. Recuerdo ahora que Freud no gustaba en buena medida de los filósofos, decía algo así como que eran unos charlatanes; no sé por qué.
¿Querrás preguntar el placer del sexo?, ¿el sexo como placer?
R.M.: ¿Qué relaciones encuentra entre escritura, sexo y placer?
F.L.V.: ¿Querrás preguntar el "placer del sexo?, ¿el sexo como placer?
Creo que la escritura es una mezcla de placer y angustia. Un castigo divino o algo así. No encuentro ninguna relación básica entre los tres elementos. El sexo como recurso literario puede estar en una obra, claro, pero eso es otra cosa. La relación más terrible es la de amor-sexo. Pero nadie la podría explicar, y eso es lo bueno. Entonces uno piensa que cuando los amantes ya son viejitos, y ya no tienen sexo, ¿qué los une entonces? No sé. Tal vez el sinsentido de separarse a esas alturas de la vida.
la palabra, el libro, los distintos géneros literarios, editados ya sea en papel, en humo, en lo que fuera, no desaparecerán
R.M.: La rapidez del cinematógrafo y de la internet… ¿cómo vincula este mundo de imágenes con la literatura? ¿Hay una crisis de la palabra?
F.L.V.: El cine no me gusta, es algo irreal; la ficción literaria es real. No hay crisis de la palabra en el sentido de que ahora, con la internet, quizás se lea menos en "impreso", tanto libros como periódicos, etc., pero existe más poder de selectividad, uno puede leer, ahora mismo, un texto que se publicó, ahora mismo, a 30 mil kilómetros de distancia. De modo que hay más libertad, más libertad para escoger.
Al menos en Estados Unidos ya comienzan a tomar fuerza las editoriales que dan a conocer sus obras mediante el libro electrónico. Las utilidades –en dinero, quiero decir– para estas editoriales, y para sus autores, son mayores que en el caso de las editoriales "tradicionales". Y el precio de los libros es mucho más bajo. Sólo se trata de tener un banco de datos con los lectores en potencia de las obras de tal contenido y tal estilo y enviar la promoción. Esto se halla en ciernes, pero yo le veo futuro. Claro, leer en papel es lo más placentero que hay; pero tampoco podemos asegurar que, con el desarrollo de la tecnología, no sea posible hallar una forma igual de placentera sin "papel" de por medio.
Algo que quizás resulte paradójico es que con la globalización y la tecnología, la creación literaria se está regionalizando; tal vez sea porque la propia tecnología –que incluye el avance en la producción de libros impresos– ha permitido que muchas más personas se informen sobre el hecho aquí y allá y los creadores puedan dar a conocer sus libros en pequeñas editoriales, con tiradas pequeñas. Así, puede ocurrir que uno o varios autores, por su indudable calidad, se destaquen en una región determinada, lo cual no obsta para que posteriormente trasciendan las fronteras.
Cuando apareció la televisión se decretó la muerte del teatro, la danza, los conciertos, etc. No fue así. Y la palabra, el libro, los distintos géneros literarios, editados ya sea en papel, en humo, en lo que fuera, no desaparecerán.
Hay tropos, ya lo sabemos, que no tienen ni una sola palabra en sentido figurado, y son tremendos
R.M.: Y un poco más allá, pero vinculado con la pregunta anterior: de la imagen, ¿qué le interesa como escritor? ¿Tiene algún concepto o definición propia de la misma dentro de su escritura?
F.L.V.: La imagen poética, la metáfora, el tropo –creo que sobre todo a eso te refieras-, pues tiene que ver con la personalidad del escritor, con su enjundia más bien. Hay quien la utiliza porque está en su Yo creador, hay quien trata de hacerlo forzado y no le sale. Hay tropos, ya lo sabemos, que no tienen ni una sola palabra en sentido figurado, y son tremendos. Nada, esto como otras cosas en la creación, llega, no se busca.
Pero chica, en otro aspecto, es la "imagen" lo que se ha impuesto en los últimos tiempos, después que se "inventó" una cosa tan banal como el videoclip. El mundo está jodido porque la gente ya no le "exige" a un cantante o a una cantante que cante, sino que tenga una imagen "bonita" o sexy (qué palabra tan cabrona), y que sus movimientos sean eso, erógenos, o espectaculares o llamativos en fin. Siguiendo con el tema de la música, fíjate que hasta las orquestas hacen su videoclip, y se supone que las orquestas no son para mirarlas ejecutando coreografías –que a veces dan pena, porque alguno que es zurdo bailando se va de banda–, sino para bailar con ellas en vivo o de alguna otra manera, pero no para "verlas". Así, podemos tomar como ejemplo a una señorita colombiana que berrea de arábiga manera, pero es hermosa, erógena, etc., y tiene muchos seguidores, y mucho dinero. El mundo occidental está en ruinas porque admira a una cantante que berrea. Y hay en México algún otro ejemplo, otra señorita que nunca en su cabrona vida ha cantado, pero llena los foros porque tiene esa capacidad para lucir bien, moverse bien y calentar a unos y proporcionarles no más que envidia a otras (porque muchas mujeres que admiran a "artistas" así, las admiran sin darse cuenta que es envidia lo que sienten); nunca ha cantado, te digo, y lo terrible no es que ella crea que canta, sino que se lo crea la gente. Sigo con esta "cantante" azteca: una vez intentó cantar en vivo, a pecho limpio, y por poco se le sale el útero por la boca. Permíteme desahogarme y poner otro ejemplo, pero esta vez de un varón (para no discriminar a la mujer, además): un cantante español, también famoso por la imagen, que se pasa todo el trayecto de una canción diciendo esencialmente "te amo", y cómo chilla este asesino. Todo esto se lo imponen a uno en dondequiera que vaya, y en las guaguas no hay escape, hay que meterse de todas formas a estos mercachifles En fin, la imagen, que ya, como sabemos, se sobrepone aun a las letras de las canciones, porque creo que personas como tú, Rita, coincidirán conmigo en que las letras de estas canciones son, en una agobiante mayoría, pura mierda. Pero la gente sigue a estos cantantes que no cantan y balbucen letras de hojarascas porque la sociedad occidental está descojonada. ¿Tú te imaginas a Pedro Vargas, con aspecto de indio y un cuerpo más bien cuadrado, pero con una voz fantástica, en estos tiempos? Estaría jodido, no habría manera de que se insertara en la nueva onda. Bueno, los que lean esta respuesta pueden quejarse de que el asunto de la imagen se lo dediqué casi todo a los cantantes, las cantantes, la música pop. Con toda intención, porque estas personas no pasarán a historia alguna haciendo esa mierda que gorjean, pero me jode que el mundo –occidental, debemos puntualizar siempre– esté tan excrementizado que estos tipos y tipas vivan como la Carmelina del cuento mientras los poetas se la tienen que chupar. Será envidia de mi parte, quizás; o resentimiento. Me da igual. Ya sé que el mundo no es justo, así que no sé por qué me encabrono con esto.

Fuera del juego
no puedo decir que un libro, una novela, por ejemplo, sea capaz de derribar una dictadura como la cubana. Pero al menos la afloja; de lo contrario ellos no le tendrían tanto terror a la literatura, o a la creación literaria
R.M.: Parto del criterio de que toda escritura es subversiva pero ¿podría ahondar en este concepto y en la relación de escritura y poder bajo regímenes totalitarios?
F.L.V.: En los regímenes totalitarios, ya lo sabemos, se censuran los libros que atacan al poder, o no se avienen con el Dogma en todos sus matices, como es el caso de Cuba. Es decir, el estalinismo creo que es el régimen más censor que ha existido, lo cual demuestra, entre otras cosas, su debilidad. Yo no puedo decir que un libro, una novela, por ejemplo, sea capaz de derribar una dictadura como la cubana. Pero al menos la afloja; de lo contrario ellos no le tendrían tanto terror a la literatura, o a la creación literaria. Pues resulta que un libro se mete por aquí y por allá, y así no pueden ellos prever su alcance. Un cañonazo es otra cosa, se ve venir, se ve de dónde viene y ahí va el contraataque. Y por otra parte, ya tú sabes que las dictaduras comunistas, como la que impera en Cuba, no sólo les temen y censuran a los libros "contestatarios", sino además a los que se apartan de su filosofía materialista y atea. De la misma forma que censuran las letras de canciones o los dramas que tiendan al idealismo o el misticismo, etc.
Habría que buscar con pinzas muy finas alguna pieza literaria que no fuese subversiva en un sentido o en otro. Las que alaban a un tirano, por ejemplo, subvierten el orden igual que las que lo atacan. Cuando César Vallejo dice "Esta tarde llueve en Lima como nunca /y no tengo ganas de vivir, corazón", está escamoteando el concepto bíblico del sentido de la Vida. Si te fijas en Madame Bovary, a lo largo de toda la obra corre un quejido contra una sociedad pazguata. Bécquer se olvida del alcance de Dios cuando dice adorar a una mujer "ciego, absorto y de rodillas, como se adora a Dios ante un altar". Nicolás Guillén –salvando las distancias– da muestra de un exclusivo sentido de la venganza cuando escribe "no me dan pena los burgueses vencidos". Si escribes un poema que diga "su voz, su cuerpo claro, sus ojos infinitos", estás dándole de lado, aunque no fuera en sentido literal, a los cuerpos que no son "claros". Y así, hasta el infinito. Es indefectible tomar partido, aunque aparentemente no se note, hacia uno u otro camino. Quienes dicen que en sus obras no abordan la "política", a mi modo de ver, se equivocan. Víctor Hugo, Tolstoi, Dickens, no escribían de política, pero más políticas no pueden ser sus obras.
Sin lengua
aquí hablan español, pero hay que adaptarse a un sinfín de palabras que no significan lo mismo que en Cuba
R.M.: Al llegar a México, Ud. tuvo la posibilidad de seguir comunicándose en su lengua, algo con lo que no cuentan los escritores cubanos radicados en otros países de lengua no española. Sin embargo, ¿qué otros problemas relacionados con la comunicación enfrentó Ud.?
F.L.V.: Bueno, aquí hablan español, pero hay que adaptarse a un sinfín de palabras que no significan lo mismo que en Cuba. Y que si no "copias" rápidamente la diferencia de significado, puedes buscarte problemas o serios contratiempos.
Valorando la comunicación como algo muy amplio hay que tomar en cuenta, sin duda, la idiosincrasia de un pueblo determinado. Aquí me tropecé con un concepto de la (im) puntualidad que difiere mucho del de Cuba. Asimismo, con un sentido de cumplir con lo prometido que también es muy distinto del de la Isla. Y siempre o casi siempre cierto suspense para obtener una respuesta o el resultado de alguna gestión. En lo que se refiere al ámbito intelectual, específicamente al literario, no hay nada más parecido que Gengis Kan contra Gengis Kan, es del carajo.
eso de "emigrante económico" es un eufemismo
R.M.: ¿Cómo define el "exilio" un escritor, es decir, una persona acostumbrada a vivir diferentes exilios e inxilios, incluso, en su propia tierra?
F.L.V.: Yo me adhiero a lo dicho por José Martí: "No hay patria en tierra ajena". No todas las personas ni todos los exilios son iguales, claro. Cuando alguien decide exiliarse es porque ya no resiste el inxilio, algo terrible también. Como he dicho en otras oportunidades, en la época moderna todos los emigrantes son políticos, eso de "emigrante económico" es un eufemismo. Quien emigra de su tierra lo hace por causas políticas; o sea, la política existente en su país siempre será la causante de que la economía esté en crisis y los hombres tengan que marcharse del lugar en donde nacieron y crecieron. A esto, naturalmente, hay que agregar la falta de libertades, como es el caso de Cuba. Si hoy en Cuba hubiese una economía floreciente y los ingresos del ciudadano fuesen decorosos para vivir "materialmente" bien, la gente también se iría. Si tienes a un pájaro en una cómoda jaula, lo alimentas bien y le designas un superdotado veterinario, no lo dudes: en cuanto el pájaro tenga un chance se va pa´ l carajo en busca de la libertad, donde pueda cantar lo que le dé la gana, no lo que quiera el dueño y a la hora que le convenga al dueño. En fin, la razón del exilio siempre será política. Refiriéndose al exilio, Nazim Hikmet escribió: "Pero ni aún la casa de un hermano / podría hacer olvidar la casa propia".

Antes de terminar
¿no hay impiedad suficiente cuando a una madre le arrancan a su hijo adolescente y se lo llevan para un sitio que nadie sabe dónde está, y no tiene derecho la madre a saber nada?
R.M.: Me perdona la falta de brevedad de esta pregunta; pero hay lectores extranjeros (y aun cubanos) que desconocen del siguiente tema: Ud. es de los pocos escritores cubanos que ha tratado en su crítica y en su ficción el tema de los campos de concentración (conocidos como UMAP) en la década del sesenta (de 1965 a 1968). Me gustaría entonces ensayar un espectro histórico dado que la isla de Cuba sufrió los primeros campos de concentración en el siglo XIX con el general español Valeriano Wayler (quien dicho sea de paso, inspiró a Adolfo Hitler). ¿Cuáles serían las razones para que un círculo histórico se haya cerrado y cumplido en un mismo punto a menos de 100 años? ¿Por qué la indiferencia del mundo occidental? ¿Cómo el mismo fenómeno se denuncia y rechaza como suceso en Alemania, pero ni se menciona para la Isla caribeña? ¿Qué explica la mala memoria para Cuba y sus ciudadanos?
F.L.V.: En realidad, ni lo de Wayler (¿estará bien así el apellido?, mi maestra de Historia escribía Weyler) ni mucho menos lo de Hitler, ni tampoco lo de Stalin ni los Galones Negros de Checoslovaquia se podrían comparar con las Umap de Cuba, que estarían inspiradas en algo de lo anterior pero no llegaron, ni en tiempo ni en niveles de crueldad, a aquellas expresiones de discriminación.
Nada, las cosas suceden porque suceden las condiciones o las casualidades. De no haberse implantado en Cuba el sistema comunista no se hubiera cumplido un ciclo en el mismo punto en menos de 100 años. Las Umap sólo duraron tres años, será por eso que no trascendieron como los otros fenómenos que tú citas. Asimismo, en más o menos su año y medio o dos años finales, las condiciones fueron cambiando para bien de los que estaban allí confinados. Por otra parte, el gobierno se cuidó mucho en mantener en el mayor secreto posible el tema de las Umap.
Se sabe que las condiciones cambiaron, como decía, sobre todo porque fueron detectados estos campos de trabajo forzado por aviones espías estadounidenses. Pero también algunas voces se alzaron en el extranjero cuando la "noticia" se corrió por medio de uno u otro laberinto.
Aun así, ¿no hay impiedad suficiente cuando a una madre le arrancan a su hijo adolescente y se lo llevan para un sitio que nadie sabe dónde está, y no tiene derecho la madre a saber nada? Sólo con eso basta para situar a las Umap en el pedestal de lo inhumano.
Y otro detalle amargo: quienes salían de las Umap tenían que arrastrar ese "expediente" toda la vida; como si en lugar de haber sido víctimas continuaran siendo una especie de "victimarios". Ese "baldón" aún lo arrastrarán, en caso de que todavía vivan en Cuba, hasta la muerte. Les "sale", como una mancha, en cada "proceso evaluativo" de su persona que lleve a cabo el gobierno. Esto no lo entiende nadie.
ni el mejor de los babalaos literarios podrían responder con justeza esa pregunta
R.M.: ¿Cuáles son los síntomas y gestiones de la literatura hispanoamericana en el Siglo XXI?
F.L.V.: No, no sé. No creo que nadie pueda responder esa pregunta con propiedad, nadie puede abarcar tanto. Por ejemplo, yo no sabría decirte cómo anda la literatura de Ecuador. Creo que ni el mejor de los babalaos literarios podrían responder con justeza esa pregunta.
la literatura erótica no existe
R.M.: ¿Ensayamos una definición para literatura erótica u homo-erótica?
F.L.V.: Ya lo he escrito por ahí: la literatura erótica no existe. El erotismo es un recurso dentro de cualquier obra literaria. Que en algunas piezas literarias haya más erotismo que en otras no significa que estas obras resulten un género aparte. Eso es un invento para el bien de algunos. La literatura homo-erótica no es más que el mismo drama, el mismo o los mismos temas eternos si bien sea otra la orientación sexual de sus personajes. Es lo mismo, la pasión, el amor, la traición, la muerte, el olvido, la lealtad, etc.
me sigo preguntando
R.M.: ¿Una pregunta que siempre le haya martillado…? ¿Una posible respuesta para la misma?
F.L.V.: ¿Será la casualidad, madre de que tantos destinos, vidas, sociedades cambien, algo totalmente –totalmente, enfatizo– del "más acá"? No sé, me sigo preguntando.
Encuestas/Entrevistas © Rita Martin

9 comments:

Anonymous said...

Esta entrevista nos da muchos puntos de vistas qe debemos considerar no nada más de un excelente escritor, sino además de una persona de una gran inteligencia innata, guardo para mi archivo varias de las respuestas.
Gracias.
Alejandra Carral, México

Abel German said...

Magnífica entrevista, como corresponde al magnífico escritor y persona que es Félix Luis Viera. También magnífico espacio el de Grafoscopio. Me ha producido un gran placer conocerlo por lo que agradezco a Rita su también magnífico esfuerzo.

Anonymous said...

Viera querido, me pareció formidale tu entrevista.
Realmente hablas de una manera muy verdadera.

Cariños:
Aimée González Bolaños

Anonymous said...

La entrevista de Rita es buena, da margen para el explayamiento. Jas respuestas te acercan al lector. Me parece crucial entre ellas lo que sigue:

"¿Te imaginas qué encontrará sobre aquella época en las hemerotecas un investigador en el futuro? Nada, la felicidad de un pueblo honrado y trabajador guiado por su comandante invicto y victorioso. La novela trata de aportar para que los investigadores que vendrán no pierdan su tiempo en las hemerotecas."

"Cuando apareció la televisión se decretó la muerte del teatro, la danza, los conciertos, etc. No fue así."

Por ejemplo este párrafo (completo) está magnífico: "Habría que buscar con pinzas muy finas alguna pieza literaria..." En fin, los felicito a ambos.

María Eugenia Caseiro

Anonymous said...

Felicidades por esa entrevista; es muy amena. Me gustó cómo la entablaron.

Ian Soriano

Anonymous said...

Muy buena entrevista, muy buenas respuestas y muy buenas preguntas, y polémicas ambas. Vale la pena.

Lucy Mesa

Anonymous said...

Qué decir, las preguntas son de mucha actualidad y las respuestas muy inteligentes y abren la polémica de asuntos que hoy lastiman sobre todo a personas sensibles. Gracias.María Villagra, México

Teresa Dovalapge said...

¡Feliz Luis escribe porque es un tremendo escritor! Vaya, es eso, no hay más vueltas que darle. Me hubiera gustado leer esos ejemplares quemados…Mira tú qué modestia…cuando tantos bodrios que debían haber conocido el fuego ab ovo andan por las librerías de lo más campantes y pimpantes. Y El corazón del rey es, en efecto, un documento de su época. Y sobre su tono, su registro, yo creo que lo ha alcanzado, puedo leer un libro de Feliz Luis sin saber que es suyo y algo saltará de la página y me lo gritará…¡Sus libros son, entonces, cañonazos! En cuanto al idioma y las diferencias lingüísticas, pues nada, que a uno no se le puede ocurrir coger una guagua en México, ¿verdad? ¡Gracias por esta magnifica entrevista!

Anonymous said...

El asunto es que la calidad de las respuestas esté en sentido directo con la inteligencia de las preguntas. Asi pasa en esta entrevista, por eso está muy buena. Vamos, que si no hay buenas preguntas no hay buenas respuestas.
Creo que hay respuestas polémicas, pero lo que se responde sobre los artistas pop está genial, la neta, qué gente tan culera viviendo bien y los pendejos por acá pagando hasta lo que no tienen por verlos, por eso estoy de acuerdo con la pirateria, que vendan sus discos de a peso, que se chinguen. Gracias a la señorita Rita y a Viera.

Luis Salvatierra