La noche del viernes se presentó en el
Festival del Monólogo Latinoamericano A una Voz, Nostradamus. El estado del tiempo, una pieza que
parece haber sido escrita especialmente para la actriz que la interpretó: la
argentina Alejandra Corujo. Y es que difícilmente podría encontrarse otra
actriz con su gracia natural y dominio escénico, además de las cualidades
físicas que exige el personaje.
En esta pieza todo mueve a risa, pero ya se
sabe que los temas más serios siempre llegan mejor al espectador si se
presentan en tono de comedia.
El personaje de Nostradamus es una
mujer que ha entrado sola en un bar para relajarse tomando una copa, tal como
acostumbran a hacer los hombres, pero no puede evitar que todo el mundo se le
quede mirando, como si fuera un bicho raro. Ella se queja de la curiosidad que
despierta, sabiendo que se debe no solo al hecho de ser una mujer sola en un ambiente
usualmente destinado a los hombres, sino a que su cara resulta familiar a
muchos: no en balde es la meteoróloga encargada de dar los pronósticos del
tiempo en un canal de televisión.
La mujer se queja de haber sido usada por el
marido, el padre, la hermana y hasta su propio hijo, pues todos han vivido a
costa de su popularidad, pero ha decidido no dejar que la sigan usando. Y a
medida que cuenta su historia, aprovecha para atacar sin piedad al sexo
masculino, calificando a los hombres de estúpidos capaces de creer en cosas tan
absurdas como las predicciones de Nostradamus, pero incapaces de tomar en serio
sus pronósticos y salir con un paraguas cuando ella anuncia un día lluvioso en
el parte del tiempo.
El público no puede parar de reír con la andanada
de insultos en contra de los hombres, a quienes el personaje de Alejandra
considera, sin embargo, un mal necesario para lograr procrearse. Un discurso
ultrafeminista que mueve aún más a risa cuando se sabe que fue escrito por un
hombre.
El autor del monólogo es el escritor cubano
Jorge Carrigan, para quien no son ajenos los temas feministas y la literatura
escrita desde el punto de vista de una mujer. Hace poco más de un mes Carrigan
presentó en Miami su segunda novelaMuñequita linda, en la cual la protagonista,
una muñeca diseñada para satisfacer los deseos sexuales de su comprador, decide
anular legalmente su matrimonio porque su esposo no la trata con la dulzura y
delicadeza que exigían las instrucciones del fabricante.
Un reclamo semejante hace el personaje de
Alejandra en este monólogo, refiriéndose al marido y dueño del canal de
televisión donde ella trabaja, quien la ha hecho aumentarse los senos y los
glúteos con cirugías para garantizar la atención de los televidentes. Esto, a
pesar de la tortura que significa, según ella, soportar el peso de los
implantes. El resultado ha sido que nadie presta atención a sus pronósticos,
sino a sus atributos físicos. Ya quisiera yo ver a Nostradamus con tetas,
proclama ella, provocando una vez más la risa de la audiencia.
Nostradamus. El estado del tiempo, una puesta
en escena dirigida por Vivian Morales, se vislumbra ya como uno de los mayores
éxitos del Festival Latinoamericano del Monólogo, evento que se extenderá hasta
el 26 de febrero en la sala de teatro Havanafama, y en el que, como suele
suceder, el plato fuerte es el drama y no la comedia.
1 comment:
¡Está bueno eso, me gustaría ver el monólogo! Gracias por la info y muchos cariños de Taos....
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